viernes, 28 de septiembre de 2007

Más cigüeñas


He tomado unas fotos de las cigüeñas apostadas en la torre de nuestra Bella Desconocida, hablando sí como dices con su crotoreo estridente, y he tenido después la suerte de escuchar una magnífica intervención del Juez de Menores de Granada, tomada de la web de educamadrid (http://mediateca.educa.madrid.org/reproducir.php?id_video=jianzc4s1quh4cv2).

Me la envió hace ya tiempo un querido compañero y amigo que, muy despacio como el aleteo de las majestuosas zancudas, va implicándonos a unos cuantos con sus inquietudes, a la par que se desliza ocasionalmente en los medios. Y observa atento, como aquellas desde la torre, lo que pasa a nuestro alrededor.

¿Cuántos de nosotros tenemos similares inquietudes, iniciativas, cuántos sentimos crecientemente la necesidad imperiosa de hacer algo, de intentar cambiar las cosas antes de que pase nuestro tiempo? Puede que las cigüeñas sepan hablar, pero ¿por qué hablan solas?

jueves, 27 de septiembre de 2007

Cigüeñas


Estas últimas tardes de septiembre las he ido viendo llegar a última hora. Avanzan lentamente desde el páramo en bandadas de treinta o cuarenta, con su lento y constante aleteo. Parecen enormes galeras, cortando el viento a golpes de tambor e impulsos de sus bancos de remeros. Vuelven con el buche repleto, de topillos ahítas, pintando de blanco y negro el cielo.

Regresan a una ciudad que es la nuestra y no lo es, a la ciudad de los tejados de aquella donde la gran cigüeña blanca contemplara la pérdida prematura del infante real. Y nos contemplan desde los pináculos de la Catedral, desde las torres de San Miguel y de la Diputación, desde las afiladas antenas de telefonía, y quien sabe qué dirían de nuestras estúpidas disputas, de nuestras ridículas ambiciones, de nuestras dichas y desdichas, si tuvieran la suerte – o desgracia – de saber hablar.

lunes, 10 de septiembre de 2007

Ayvóo, ayvóo, ayvó, ayvó, ...



Ahora sí va en serio, se acabaron las excusas del final de vacaciones y de los casetolines. Todos al tajo sin rechistar, sin depresiones urbanas ni sindromes postvacacionales que valgan. Ayvóo.


A ver si se llevan las casetas de una vez, que esto de venir por la mañana y encontrarlas medio desmontadas en las calles da un mal rollo que te pasas. Han pasado los festejos sin pena ni gloria, ni el Miski me ha dado una misera alegría con sus bocatas, al parecer su intervención más sonada en la Feria fue tirarle el reloj a Enrique Ponce (supongo que no lo tomaría a mal, ni pensaría que el apasionado aficionado que otros años le arrojara todo su manojo de llaves -verídico- quisiera decirle sutilmente que le había llegado la hora). En fin, yo he salido bastante bien parado, ninguna ingesta excesiva de casetopinchos y una sola salida entre semana, grata al fin y al cabo por la compañía y el feliz descubrimiento -por mi parte, ya sé que la pólvora está descubierta ya- de la nueva, por renovada y por cercana a la novelle, cocina del TOUCHARD, cuyo menú de degustación recomiendo encarecidamente. Sabia y sensata apuesta la de estos jóvenes restauradores que están reviviendo un antiguo local con sus modernas artes culinarias, esperando espero reinvertir poco a poco sus eventuales beneficios para irlo convirtiendo en un marco más acorde con las obras de arte que presentan. Y puestos a hacer publicidad by the face, una nueva recomendación y termino, que no os quiero distraer aunque es materia apropiada, solo deciros que la opulenta cigarrera de la lencería AMICA, sita en la bocaplaza del Mercado de esta capital, porta en su bandeja algo más que tabaco y cerillas, oficiando como Suma Sacerdotisa y custodio de ciertos exóticos y misteriosos tesoros que harán discretamente las delicias de palentinos y palentinas todavía en vías (o tal vez cuestas) de liberación sersuarrrl, Dios lo quiera porque como dijo no se quien lo que hace falta es j ... menos y f ... más. Ale, lo dicho, ayvóooooooooooo!

martes, 4 de septiembre de 2007

Vuelta al cole

Hoy era el primer día "lectivo" en muchos sectores y andábamos todos con cara de no querer empezar. La calle sigue bullendo con el jolgorio festeril. A los amigos del exceso verbal inteligente os recomiendo la columna del inefable Jaime Esquete, esta vez estoy con él al cien por cien. Y lo peor es que el que menos se esfuerza es el que más se queja.

Oscar dijo de la corrida de ayer: alucinante, Enriquito Robocop mereció otra oreja. El bocadillo, de nuevo, de nada. AY que VER.

lunes, 3 de septiembre de 2007

firma invitada: CASETOLÍN (Walter)

Casetolín

Esta humilde ciudad de la estepa castellana tiene un regidor enamorado de las casetas.
A las habituales prácticas de instalar casetas informativas por las distintas calles y plazas de la ciudad durante todo el año, no contento con su gran obra de arquitectura que tuvo a bien con obsequiarnos en el antiguo parque del Salón en donde llegó a destinar una calle permanente para ellas, añade el “florecimiento” casetil en el advenimiento del mes de septiembre.
Es su obra. Tal empeño y tesón pone que nada ni nadie puede impedirlo. Da igual que alguna ordenanza pueda resentirse ante la llamada general al consumo del vino y la tapa, si con grasa mas rica. Si los caseteros no quieren pagar la ocupación de la calle, pues alegría, no vayamos a quedarnos sin fiestas, perdón digo sin casetas. Pues no pagan. No se recuerda cosa igual ni en épocas pretéritas.
Y todo parece que se hace en recuerdo y para honrar al galo Santo. Tan es así que tal día como hoy acude a la Catedral construida en honor de nuestro Patrón y, con una cara de niño bueno al que dan ganas de dar un beso en la frente (de esos niños que para sí quisieran todas las madres), loa y ruega al Santo. Y después de agradecerle todo lo generoso que ha sido durante el último año, después de pedirle por los que tristemente nos faltan, con esa cara, carita de niño bueno, le pedirá mas bienes para los palentinos, mas trabajo, mas viviendas de protección oficial y menos hipotecas, mas industrias, mas igualdad de género, mas paz.
Naturalmente les estoy hablando de las fiestas en honor de San Antolín. Aunque alguno pueda pensar otra cosa, que hay gente para todo.

Algo es algo

Puesto a salvar algo de estas fiestas me quedaría con el teatro de calle, de cuyas actuaciones estamos disfrutando por distintos rincones de la ciudad. Así como el asalto al asfalto de la gastronomía comienza a resultarme incómodo, la oferta cultural plantada en las aceras me trae, salvando las considerables distancias, ecos del fantástico FRINGE FESTIVAL de Edimburgh. Puede que en ese tipo de actividades hay un filón para Palencia, aunque otras capitales, y muy en particular Segovia con su TITIRIMUNDI lo están explotando ya.
Por cierto, y vista la explicación remitida a mi desconcierto por el corte de tráfico del jueves, hoy os dejo caer la siguiente pregunta ¿cómo se explica el tremendo socavón de las baldosas de la recreación de la Puerta del Mercado, frente al acceso al Parking de Ponce de León (estoy hasta las narices de llamarlo Pío XII, eso siempre ha sido Ponce y Punto)?
Hoy doy, por último, entrada a dos novedades en el blog.
En priner lugar y durante la feria de San Antolín añadiré a mis textos el comentario diario de Miski sobre la corrida del día anterior, aderezado con la descripición del pertinente bocadillo taurino - resaquil, todo ello en transcripción literal. El comentario a la tarde de ayer es tan escueto como atinado, a la vista de las crónicas más sesudas: "DeProrable" (síc.), Miski dixit; el bocadillo, a la altura del espectáculo, brilló por su ausencia por primera vez en muchos años de abonos compartidos (y eso que con tal de no acudir con las manos vacías se le ha visto rebañar la nevera hasta extremos impensables, como la "esquisitez desesperada" compuesta de dos rebanadas de pan de molde (la primera y la última, por más señas) untadas de salsa de tomate "solis". En fin, Miski es así y espero contar con el como firma invitada ocasional.
La segunda novedad se refiere precisamente a eso, a ciertas firmas invitadas que tendrán su espacio ocasionalmente indicándose así en el título. Hoy abre esta opción mi buen amigo Walter con un texto que anexó también a modo de comentario.