lunes, 3 de diciembre de 2007

LA CALMA QUE PRECEDE A LA TORMENTA


Se aproximan las fiestas navideñas, y con ellas la epidemia de solidaridad y buenos deseos. Hasta los políticos confraternizan entre ellos antes de pasar a las manos durante las próximas elecciones. Los problemas, en cambio, no descansan. Los de las pistolas no saben de paz y amor.

Todo aquel que no se signifique en la búsqueda de una solución no es sino otra parte del problema. Los augurios son oscuros, el oráculo está intranquilo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Las colinas del whisky, curiosa asociación walden, no sabía que fueras aficionado.

Anónimo dijo...

Perdona walden, me olvidé de una cosa, formar parte del problema por no buscar la solución me parece un axioma maximalista y un tanto peligroso.

Anónimo dijo...

Sin salir en defensa de nadie, entre otras cosas porque no lo necesita, creo que walden no ha dicho quien no se signifique "forme parte" del problema. Lo que ha manifestado es que "es otra parte" y entiendo que quiere decir que es una circunstancia añadida que no ayuda a resolver la situación. En mi modesta opinión, sin necesidad de salir con banderas y hacer aspavientos, debemos ser solidarios y mostrar, sin miedo, nuestra posición. Dejar hacer, dejar pasar, resta legitimidad y no es la solución.

Por supuesto que tampoco lo es acometer la situación con medias verdades, pues acaban convirtiéndose en las peores mentiras, de inciertas consecuencias. Y, me temo, que algo de esto nos está tocando vivir.